Estamos pintando la cara del abuelo de Up, la película que vimos el otro día por el frío. Tiene una cara muy divertida, llena de arrugas, los ojos como tristes y cansados. Y es que las personas mayores, con el transcurso de los años se van llenando de "marcas de la vida". Por eso nosotros hemos querido acentuárselas un poco más si cabe gracias a una nueva técnica que nos han explicado nuestros maestros: el carboncillo. ¡Nos hemos puesto como auténticos mineros!, negros por el hollín que suelta el carboncillo. Pero ha sido muy chulo. Ya conocemos otra forma más de expresar nuestro arte.
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